Estos días navideños en muchas cenas de nochebuena o comidas de navidad, hemos degustado unos magníficos pescados y mariscos, algunos de ellos procedentes de las lonjas gallegas, y de ellos, algunos procedentes de las costas gallegas, que a su vez también algunos de ellos han sido capturados mediante pesca artesanal y sostenible. Con este post, Fresco y del Mar os quiere recordar que para que cualquiera de nosotros disfrutase de un pescado salvaje o marisco gallego en su mesa, está detrás el trabajo de la gente del mar, un trabajo siempre duro, en ocasiones arriesgasdo, y que muchas veces se desarrolla en condiciones climatológicas muy adversas. Mención especial merecen los percebeiros que en trabajo diario arriesgan su vida.
Costa da Morte, ría de Muros y pesca artesanal
Ya que Fresco y del Mar solo comercializa pescado y marisco gallego, concretamente de Costa da Morte y de la ría de Muros, y que además ha sido capturado mediante pesca artesanal y sostenible, nos queremos referir a los marineros y pescadores que capturan el pescado y marisco en estas zonas y emplean estas artes de pesca no lesivas para el medio ambiente.
En ocasiones en condiciones muy adversas
Los barcos de las cofradías de Costa da Morte y ría de Muros salen a faenar todos los días de la semana, excepto el fin de semana, y lo hacen por la mañana. Salen siempre, a no ser que las condiciones del mar lo desaconsejen. Muchos días que salen el estado del mar no es fácil por condiciones de fuerte viento, oleaje... También en otras ocasiones las condiciones climatológicas son incómodas para realizar su trabajo, debido a lluvias, frío, niebla...
Después de la jornada de trabajo regresan a sus respectivos puertos, y la pesca recogida se lleva a las lonjas para ser subastada. En unas ocasiones la pesca ha ido bien, y en otras las capturas son escasas, a lo que ya están acostrumbrados.
Los 'percebeiros' de Galicia
Una mención especial queremos dedicarle a los percebeiros, ya que su salida diaria, debido a que recogen los percebes a mano, y que el percebe solo se desarrolla en zonas de mar extremadamente batidas, supone un continuo riesgo para sus vidas. Realizan su trabajo en grupos de entorno a cuatro personas, uno de los cuales se queda vigilando a los que están en las rocas recogiendo el percebe, y lo hace desde la embarcación que los ha transladado a las zonas de recogida de percebe. El percebeiro debe estar muy pendiente a los golpes de mar, ya si lo sorprende un golpe de mar y lo precipita contra las rocas, el resultado puede ser fatal.
Este es el motivo por el que el percebe alcanza un alto precio en el mercado, especialmente los días de las fiestas navideñas. Una elevada demanda, y un percebe escaso, recogido por hombres y mujeres que arriesgan su vida, y con unas limitaciones muy estrictas en cuanto a número de kilos al día que puede recoger cada pescador, ya que no puede ser superior a cinco.
Nuestra consideración a los pescadores artesanales gallegos
Desde Fresco y del Mar queremos rendir un homenaje a las gentes del mar, y pediros que tengáis en cuenta que detrás de cada pescado que saboreemos o de cada marisco, hay un esfuerzo, una labor, siempre dura y en ocasiones con mucho riesgo.
Joaquín Alvarez Poretela